Intentas acercarte con cautela
Al corazón cautivo que ansías,
A sabiendas que no hay más alegrías
Que duren más que una breve candela.
Pero das a entender con simpatías
Que tu gozo viste de lentejuela,
Velando que asemeja una zarzuela
Con angustias, panes y lencerías.
El precio de la felicidad sube
Dos enteros cuando causas rechazo
Y colmas la paciencia que yo tuve,
Mas no voy a dibujarte de un trazo.
Sigamos perfilando nuestra nube
Y acerca ahora tu boca a mi regazo.
jueves, 9 de diciembre de 2010
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