Entonces, absorto, ví el cielo abierto
Libre de nubes, también de adjetivos
Naciendo en su iris seres altivos
Un blanco corcel y un jinete yerto.
Mientras yo me vierto
Él sigue en activo.
Radiante espada sale de su boca,
Ocena y pestilencia manifiesta
De letrinas y bilis que ingesta
En las cruentas batallas que invoca.
La honradez es poca.
Asumir cuesta.
Bebed y comed carne de pequeño
Esclavo, grande rey y capitanes,
Sangre de capellán y sacristanes,
Tiaras huecas y coronas sin dueño,
Infante risueño,
Agrios charlatanes.
lunes, 1 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario